1. Precio muy bajo, ideal para uso temporal

Su mayor ventaja es el precio. Estos plafones suelen ser 50% más baratos que los modelos de acrílico y hasta 70% más baratos que los de vidrio. Perfectos para:

• Viviendas temporales: se pueden dejar al mudarse sin preocupación.
• Espacios secundarios: trasteros, pasillos, balcones, escaleras.
• Reemplazo de emergencia: mientras se repara la lámpara principal.

2. Súper ligero, instalación sin esfuerzo

El plástico es muy ligero: un plafón de 30 cm suele pesar menos de 0.5 kg. Beneficios:

• Seguro para techos débiles como placas de yeso.
• Fácil instalación por una sola persona.
• Menor riesgo de caída por su poco peso.

3. Resistente a golpes y más seguro

A diferencia del vidrio, el plástico no se rompe fácilmente. Ideal para:

• Hogares con niños o mascotas.
• Zonas de paso como pasillos o entradas.
• Habitaciones infantiles o áreas de uso frecuente.